Preocupación y malestar por la gestión de la vacunación contra el Sars-Cov2 en la Sanidad Privada
SATSE comparte la denuncia de los trabajadores y trabajadoras de Policlínica Gipuzkoa Quirón Salud y IMQ Zorrotzaurre en Bizkaia, realizada a través de sus representantes legales, y secciones sindicales de SATSE y enviada hoy a los medios de comunicación.
Los trabajadores y trabajadoras de Policlínica Gipuzkoa Quirón Salud y IMQ Zorrotzaurre en Bizkaia, a través de sus representantes quieren trasladar su preocupación y malestar por la gestión de la vacuna contra el Sars-Cov2, por parte del Gobierno Vasco, y del Departamento de Salud, liderado por la Consejera Gotzone Sagarduy.
Queremos denunciar que los y las profesionales del sector sanitario privado en primera línea contra el Sars-Cov2 no han sido incluidos en la etapa 1 de la estrategia de vacunación, y debido a ello, no se les esta vacunado, a pesar de ser grupos prioritarios.
La Policlínica Gipuzkoa y la Clínica IMQ Zorrotzaurre llevan trabajando con pacientes covid19 desde el inicio de la pandemia. También hemos sido parte de la red sanitaria que ha dado soporte a los momentos más críticos de la ola de contagios. En nuestros centros, hay profesionales de primera línea expuestos al contagio, y contagiados/as como consecuencia de su actividad profesional. Compartimos que debido a la disponibilidad gradual de dosis de vacunas sea necesario establecer el orden de prioridad de los grupos de población a vacunar en cada una de las etapas establecidas. Pero reclamamos que en este orden de prioridad prevalezcan los principios de igualdad, reciprocidad y transparencia.
Creemos que estos principios no se están respetando en Euskadi, a la vista de que los y las trabajadoras de nuestros circuitos Covid, y de primera línea no están siendo vacunados/as. Y es por ello, que aseguramos que se nos está dando un trato desigual y muy diferente respecto de quienes trabajan en estas mismas unidades y servicios, pero en Osakidetza.
El Departamento de Salud lleva semanas organizando la vacunación de los y las profesionales de primera línea de la sanidad pública vasca. A su vez, Osakidetza lleva citando y vacunando profesionales de estos centros públicos desde mediados del mes de enero. Sin embargo, no se han incluido las listas de nuestros centros en el listado de Osakidetza, para poder vacunar a nuestros trabajadores y trabajadoras.
Es obvio que el Gobierno Vasco recibe las vacunas para inmunizar y prevenir el contagio del personal que trabaja en los centros sanitarios, sea cual sea su centro de trabajo. Y por ello, reclamamos a la Consejera de Salud, Gotzone Sagarduy que deje de hacer distinciones entre profesionales de primera línea de la sanidad pública y de la sanidad privada. Estas distinciones no son de recibo pero además son una afrenta a la colaboración y disposición que desde la sanidad privada hemos tenido y seguimos teniendo para cuidad y atender a los y las pacientes Covid de Euskadi. Le queremos recordar que nuestros centros han estado a su disposición para el traslado de pacientes a nuestras unidades de hospitalización, recibiendo cirugías y pacientes críticos como forma de liberar presión asistencial en los centros públicos. Al igual que se ha hecho siempre que ha sido necesario, como en las campañas de gripe de temporadas anteriores.
En esta lucha participamos el conjunto de profesionales de la sanidad vasca, sea en centro público o privado, y esa unidad debería verse reconocida desde las propias instituciones que desterrando la desinformación, la falta de transparencia, y el trato desigual, deberían velar por la totalidad de todos y todas nosotras, por la salud pública y por poner fin a esta pandemia.
Es indígnate observar cómo, entrando ya en el mes de febrero, el plan de vacunación para los y las trabajadoras de la sanidad privada sigue en el aire. Por ello, los trabajadores y trabajadoras dePoliclínica Gipuzkoa Quirón SaludyIMQ Zorrotzaurre en Bizkaia, y sus representantes, exigimos al Departamento de Salud que rectifique de inmediato para que en la primera semana de febrero lleguen las vacunas a los y las profesionales de primera línea de los centros sanitarios privados de Euskadi, en clave de la igualdad y dignidad de derechos, y de la reciprocidad merecida.