Compartimos la necesidad de aumentar plazas de enfermería y fisioterapia

La crisis por la COVID-19 puso al límite a nuestro sistema sanitario, a sus profesionales en general y a las enfermeras y fisioterapeutas en particular. Asimismo, puso de manifiesto tanto deficiencias como fortalezas del sistema y ha traído consecuencias que hoy en día padecen profesionales y ciudadanía. 
 

Ha quedado en evidencia la ratio insuficiente de enfermeras y fisioterapeutas/paciente para las necesidades de cuidado de una sociedad vasca con un mayor envejecimiento, cronicidad... Como persona candidata a Lehendakari, ¿impulsaría desde Gobierno la asignación de un cupo de pacientes por enfermera, el pleno despliegue de la fisioterapia en atención primaria, así como la adecuación de un número suficiente de plazas de enfermería y fisioterapia en todos los ámbitos para dar respuesta a esta realidad?  

Nuestro programa incorpora implementar la homogeneización de la Cartera de Servicios y el despliegue de la fisioterapia, así como el desarrollo profesional de la enfermería en sus máximas competencias.

Desde el PSE-EE (PSOE) compartimos la necesidad de aumentar el número de plazas de enfermería y fisioterapeutas, para adecuarlo a las necesidades reales de nuestra sociedad. Somos conscientes de la necesidad de transformar nuestro modelo asistencial, para hacer frente al reto de la cronicidad en el que, sin duda, la enfermería y la fisioterapia tienen un papel relevante que jugar.

Todo esto conlleva el necesario aumento de plazas que recogemos expresamente en nuestro programa, junto al compromiso de diseñar las próximas convocatorias de OPEs y la ampliación de la plantilla estructural de la mano del diálogo con la representación sindical. Y en el marco de este diálogo, somos partidarios de impulsar la asignación de un cupo de pacientes por enfermera, tanto en el ámbito de la atención primaria, como hospitalaria, porque esto redundará en la calidad asistencial y seguridad de los pacientes. Una reflexión que deberá generalizarse al conjunto de los profesionales sanitarios, por los mismos motivos.

Actualmente, existe una escasez de profesionales en Euskadi entre los que se encuentran enfermeras y enfermeras especialistas, ¿fomentaría un plan vasco de contingencia para la mejora de la situación de nuestras profesionales con el objetivo de atraer y fidelizar el talento de enfermeras?

Si algo tenemos claro las y los Socialistas Vascos es que la recuperación de lo más altos niveles de calidad que todos queremos para Osakidetza, requiere de un importante esfuerzo por contar con más profesionales en todas sus áreas y la enfermería es una de ellas.

Somos conscientes de la escasez de profesionales, pero nosotros nos negamos a ser meros notarios de la realidad. Hace falta tomar dimensión del infra dimensionamiento que sufre Osakidetza y querer resolverlo. Y nosotros vamos a hacerlo.

La reclamación sobre el A1  es justa y debe llevarse a cabo, y me comprometo a mantener una postura activa para que se logre

Para ello nos hemos comprometido a retomar el carácter negociador de la Mesa Sectorial de Osakidetza para, en un marco de diálogo, abordar la revisión de las condiciones laborales, actuaciones formativas, el desarrollo profesional, la revisión de la actual RPT y el resto de las actuaciones necesarias que nos permitan fidelizar y atraer nuevas incorporaciones a nuestro servicio público de salud.

Asimismo, ha salido a la luz la profesionalidad, competencia, capacidad de resiliencia y adaptación de las profesionales de enfermería y fisioterapia. ¿Impulsaría desde el Gobierno mayor protagonismo, autonomía, reconocimiento y participación en la toma de decisiones, de nuestros colectivos profesionales? ¿Con qué medidas?

Sí, sin ninguna duda. Como he dicho, desde el PSE-EE (PSOE) apostamos expresamente por el desarrollo profesional de la enfermería en sus máximas competencias. Lo cierto es que, en los últimos tiempos, la enfermería ha tenido que ir asumiendo nuevas competencias y responsabilidades, pero sin ningún tipo de reconocimiento y sin aumento de efectivos. Y eso es lo que no puede ser.

Para nosotros es fundamental abordar esta cuestión desde el diálogo con los profesionales de Osakidetza y, en ese marco, por ejemplo, somos partidarios de abordar repartir corresponsabilidades entre los distintos profesionales que componen la Atención Primaria, apostando por una labor conjunta que redundará en favor del paciente. Y esto no puede confundirse con sobrecargar a la enfermería con procesos burocráticos o administrativos de otros profesionales. Hablamos de la participación y corresponsabilidad en el diseño y gestión de programas y procesos de salud que influyen directamente en el trabajo diario de Atención Primaria. 

Somos una profesión feminizada, vinculada al cuidado, y esto nos penaliza. ¿Impulsaría una clasificación profesional que acabe con la discriminación que supone ser Grado y no ser Grupo A en igualdad con otros y otras profesiones?

Voy a ser muy claro. La reclamación de las enfermeras sobre el A1 creo que es justa y debe llevarse a cabo y yo me comprometo a mantener una postura activa para que se logre esa reclasificación profesional.

Se ha hecho patente la penosidad, peligrosidad, requerimiento físico y psicológico de nuestro trabajo, y la repercusión en nuestra salud. Desde el Gobierno, ¿se tomarían medidas para la adaptación progresiva de las condiciones laborales a la edad de las profesionales y para incentivar lajubilación anticipada?

La adaptación progresiva de las condiciones laborales a la edad es un aspecto que puede abordarse desde la revisión de las características, exigencias, modificaciones o actualizaciones de los puestos de trabajo, de los riesgos que de ellos se derivan y de las particularidades y capacidades funcionales de las personas que realizan las tareas de dichos puestos de trabajo. Sin duda, es una reflexión que debe llevarse a cabo en el marco de una apuesta clara por un Empleo de Calidad.

La figura de la enfermera es fundamental para garantizar el derecho a la salud de la población infantil y adolescente. La Plataforma Estatal de Enfermera Escolar, de la que formamos parte, defiende la implantación de una enfermera en cada centro escolar, también en Euskadi. ¿Qué opinión le merece la implantación de esta figura impulsada por SATSE? 

Nosotros estamos de acuerdo en que la edad infantil y adolescente es clave en el abordaje de la promoción de la salud, la educación para la salud, el desarrollo de hábitos saludables y el fomento de la salud emocional. Y, precisamente por ello, creemos que es necesario fomentar un trabajo en red que ponga en valor nuestro sistema sanitario público y, que, reforzando esa red, incidamos en el ámbito educativo. En este sentido, planteamos que es necesario mejorar los mecanismos de coordinación entre el Departamento de Educación y el Departamento de Salud para atender las necesidades sanitarias específicas de la población escolar y reforzar los protocolos de actuación entre los centros escolares y sus centros de salud de referencia para la prestación sanitaria.